La RSE un compromiso de todos
La construcción en general es una industria donde el tema de la Responsabilidad Social debiese ser un ítem primordial en las empresas que la componen. Son muchas las áreas que se ven tocadas directa o indirectamente al desarrollar procesos constructivos por lo que un trabajo amigable con el entorno y medio ambiente es prioritario.
Para poder tener una guía transversal en el mundo la Organización Internacional de Normalización, compuesta por diversas organizaciones nacionales de normalización, establece o define parámetros que nos ayudan en estas materias. A este respecto específicamente la norma ISO 26000 es una ayuda de gran interés a considerar la puesta en marcha de acciones específicas en el ámbito de la RSE tanto si una empresa quiere hacerlo de forma sistemática o aislada. De este modo la empresa adquiere un compromiso con sus trabajadores, con su entorno y con la sociedad en general.
Entre las acciones que una entidad de este sector puede considerar en materia de RSE se encuentran una gran variedad de iniciativas. Como ejemplo, algunos programas que las empresas pueden plantear son:
- Mantener profesionales especialistas estables y comprometidos con la empresa.
- Prevención de accidentes en obras y movimiento de maquinarias.
- Formación y capacitación de sus operadores.
- Fortalecimiento de valores acordes con los de la empresa y el compromiso con el entorno.
Estos pilares generan beneficios en los equipos profesionales que se vierten en los resultados de la empresa y benefician el medio ambiente. Entre ellos se puede destacar un mayor compromiso de los trabajadores con la visión de la empresa y la consiguiente menor rotación laboral. Un equipo consolidado permite la identificación de los trabajadores con los proyectos que llevan a cabo.
Un tema no menor que se genera con una visión comprometida con el entorno es que mejora la imagen y el reconocimiento de terceros de la actividad empresarial realizada. Todo esto al interior de los equipos mejora el clima laboral con la consiguiente reducción de los riesgos de inactividad debidos a situaciones de descontento del personal.
Por lo tanto, implementar las normas de RSE, como la ISO-26000, en una empresa del sector de la construcción es una oportunidad para la mejora interna y para una concepción más amigable del trabajo que desarrollan las empresas constructoras.