“Hombre de una sola máquina”

En un día un poco abochornado nos tocó viajar hasta Los Andes, a la obra Senderos de los Andes III para entrevistar a don Julio González, operador de motoniveladora de Maquinaria Carrán.

Nos topamos con mucho ajetreo ese día, especialmente donde estaba Julio con su máquina. Muchos trabajadores realizaban concentrados sus labores en un incesante ir y venir de materiales, máquinas y ruidos.

Su jefe ya se había comunicado por radio con él, así que nos estaba esperando. No tenía mucha claridad de nuestra visita, hasta que le dijimos que queríamos entrevistarlo para que apareciera en el blog de la empresa con su testimonio.

Curiosamente, cuando se le declara a alguien que quieres entrevistarlo, inmediatamente aparecen reacciones de timidez y nerviosismo. Julio no fue la excepción, pero rápidamente se puso a tono con lo que esperábamos de él, dándonos la certeza de que es un buen comunicador, relajado, simpático y serio a la vez, pero por sobre todo muy profesional.

Nos empezó a contar su vida relajadamente y con confianza, la misma que pudimos apreciar al momento de operar su amada motoniveladora.

 

P: Cuéntenos quién es Julio González

R: Bueno, en lo personal soy padre de 4 hijos y tengo una sola esposa (se sonríe) y estoy muy bien con mi familia en términos personales. 

En cuanto a lo laboral, aprendí mi profesión en otra empresa durante 7 años, primero solo mirando con los maestros de calle, quienes me enseñaron los movimientos de la máquina. Como la empresa vio que yo era hábil y joven, me enviaron a un curso. Cuando cesó el trabajo con ellos, llegué a Maquinaria Carrán a través de una serie de amigos que, finalmente, me contactaron con un jefe y eso fue el año 2006, hace 14 años, y desde entonces he estado operando solo motoniveladora. 

 

P: ¿Cómo llegó a ser operador de motoniveladora?

R: Tenía a mis papás que eran camioneros, así que desde chico que manejaba camiones grandes. Cuando llegué a la primera constructora, lo primero que hice fue manejar camiones. Como vieron que tenía destreza con las manos me dieron la oportunidad de cambiarme de máquina. Me mandaron a cursos y me certifiqué. 

Me impuse llegar a ser operador de motoniveladora, que es genial, me fascina manejarla. Me demoré seis meses en tomarle el ritmo a la máquina, poder asociarme con ella. 

Mi trabajo lo hago con la mayor excelencia posible entregando el 100 por ciento. 

A estas alturas ya llevo unos 18 años de operador y soy respetado y recomendado por lo que hago.

 

P: A su juicio, ¿cuáles son las características de un buen operador de maquinaria pesada?

R: No es que se haya nacido para ser operador, sino que en el transcurso del tiempo querer serlo. No solo por conducir una máquina, sino que optar por hacer un trabajo de excelencia. No solo al manejar una máquina, sino también en cualquier otro trabajo. 

Hay que ser responsable, ordenado, tener las ganas de hacer las cosas bien. No se trata de verse “bonito”, sino de hacer un trabajo de calidad, dar lo mejor de sí. 

 

P: ¿Cómo es una jornada de trabajo en la obra?

R: La jornada empieza a las 8 de la mañana, pero los operadores llegamos unos 30 minutos antes para chequear nuestra máquina en busca de algún desperfecto, como una pérdida de aceite o combustible, o por un pinchazo en un neumático. Para esto, damos lo que se llama la “vuelta del perro” que es la inspección que comentaba.

Luego se pone en marcha el motor y se esperan unos 10 minutos para que este tome temperatura. De ahí en adelante ya estamos listos para recibir las instrucciones del jefe de obra para ver qué hacemos ese día y terminamos alrededor de las 6 de la tarde.

 

P: ¿Qué medidas de seguridad se deben tener al manejar maquinaria pesada?

R: Las medidas de seguridad son muy importantes, nos dan charlas casi todas las semanas. Por lo general no se habla mucho de maquinaria dentro de la obra. Por ejemplo, los tres puntos de apoyo, bajada de espalda, cuidado con nuestros compañeros en los radios de giro, fijarse en los puntos ciegos… porque cada operador conoce bastante su máquina. 

Las bases de trabajar seguro es principalmente preocuparse del bienestar del compañero y evitar los accidentes humanos, que podrían ser fatales. A las máquinas no les pasa nada.

 

P: ¿Qué características tiene su motoniveladora?

R: Tengo la dicha de operar una John Deere 670G. Es extraordinariamente cómoda para que el operador trabaje sin mayor cansancio. Pero la mayor cualidad que tiene la máquina es perfilar los terrenos. Se tiene que lograr que el terreno quede como “mesa de pool”. Esa es su genialidad. Es una máquina para detalles finos. Hay un trabajo de visualización del terreno, por donde pasa una motoniveladora se nota, queda todo ordenado y despejado. Todo lo ordenado que se puede ver un sector es gracias a una motoniveladora.

 

P: ¿Quién y cómo se organiza el trabajo con la motoniveladora en la obra?

R: Bueno, en mi caso tengo dos jefes directos, Don Juan que es jefe de operaciones y Don Rafael, que es el gerente de Maquinaria. Ellos nos buscan los trabajos, depende de ellos que nos manden al norte o al sur  o que nos arrienden. 

Pero en la labor diaria, en cada obra hay un ingeniero, un jefe de obra y un jefe de organización o un capataz que nos dice lo que hay que hacer diariamente.

 

P: ¿Cómo es trabajar en Maquinaria Carrán?

R: Para mí es un orgullo trabajar en Maquinaria, he sido bien calificado dentro de la empresa, reconocido por muchos, sin desmerecer a nadie porque todos realizamos una labor distinta. Me han dado mucho reconocimiento por manejar una motoniveladora. Los gerentes y los jefes que reconocen nuestra pega diaria. Como decíamos antes, para ser operador hay que amar la “pega”, en todo ámbito de trabajo hay que apasionarse para llegar a la excelencia.

Es un orgullo trabajar aquí, podemos estar todos fuera, pero funcionamos como familia, nos prestamos apoyo en diferentes cosas. No todos somos iguales, pero la mayoría funcionamos como familia.

 

Terminamos la entrevista para que pueda ir a la sesión de las fotos que van a aparecer en el blog y pudimos comprobar que no solo es un buen comunicador sino también un muy buen modelo. 

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